marzo 2014

¿Por qué no? Cambia de enfoque

Una manera de diferenciarse es cambiar de enfoque. Hacer las cosas de forma diferente o hacer, directamente, cosas diferentes.

Para cambiar de enfoque tenemos a nuestra disposición dos preguntas muy potentes y un tanto temerarias:

  • ¿Por qué?
  • ¿Por qué no?

La primera  se confronta con la creencia : “Esto siempre se ha hecho así”. ¿Por qué? ¿Podría hacerse de otro modo? ¿Qué consecuencias tendría el cambio?

La segunda se confronta con la imposibilidad: “Esto NO puede hacerse”. ¿Por qué no? Está mal visto, es muy caro, resulta incómodo… También puede declinarse en versión castiza: «¿Y quién dice (que no puede hacerse)? Todo apunta a que nos preguntemos: ¿Cómo se puede eliminar la objeción?

Ambas preguntas son, de hecho, simétricas. Ambas nos abren perspectivas diversas que podemos explorar.

Algunos ejemplos:Cambia de enfoque

Para promocionar sus nuevas rutas, la línea aérea Quantas decidió ofrecer a sus pasajeros libros editados por ella, con la peculiaridad de que su lectura duraba lo que duraba  el trayecto.  Por lo tanto, el criterio editorial era la extensión. La colección, con el título “Stories for Every Journey”, se basaba en el cálculo de que un lector lee, de media, entre doscientas y trescientas palabras por minuto. Por lo tanto, el tiempo de lectura se hace coincidir con la duración del vuelo. Los libros no se organizan por género, si no por trayecto. Este vídeo resume el proyecto de forma precisa.

¿Por qué una línea aérea no puede editar novelas? ¿Por qué los libros no pueden seleccionarse según el tiempo estimado de lectura?

¿Pueden las marcas high Street conversar con los usuarios? La firma Giorgio Armani decidió debatir sobre moda no con las it-girls del momento sino con todos los fans y organizo los Armani Tweet Talks. Los fans pudieron interactuar con los expertos en debates específicos a propósito de temas como la moda y el cine.

¿Se puede enseñar a vivir bien? El ensayista Alain de Botton apostó en 2008 por lanzar la School of Life, una especie de ágora moderna con cursos peculiares: “Cómo no preocuparse por el dinero” o “Cómo conciliar”. El proyecto ha funcionado: en estos momentos The School of Life está en proceso de expansión internacional.

De Botton ha lanzado además, como parte de la promo de su nuevo libro, “The Philosopher’s Mail”, el primer periódico redactado íntegramente por filósofos. De entrada no está mal: fundar un periódico para promocionar un libro. Las secciones llevan nombre tan evocadores como “Utopía”, “Tragedia”, “Capitalismo”…  Los artículos reformulan en clave filosófica las noticas destacadas por la prensa «normal».  Puedes leer, por ejemplo, qué nos dicen los pantalones tejanos de Larry Page, CEO de Google, sobre el concepto de jerarquía (bajo la anécdota subyace un mensaje menos sonriente).

En resumen: Por qué. Por qué no. Y a tirar millas y ver dónde nos llevan las respuestas.

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Y usted, ¿a quién se lo ha contado? El valor de los testimonios

el valor de los testimoniosLa reflexión de hoy trata de los comentarios compartidos y en concreto, de los testimonials.

Un testimonio es una opinión –positiva- que un cliente emite sobre nuestro producto o servicio. Esta opinión puede incidir  en la decisión de compra de nuestros clientes potenciales, a los que proporcionamos una referencia de alguien que ya “nos ha probado” y que está satisfecho con la experiencia. La función de los testimonios es la de reducir el riesgo asociado a la decisión.

Los testimonios forman parte de nuestra iconografía mental gracias a la publicidad televisiva. Todos tenemos presentes los anuncios –los detergentes son campo abonado- donde las señoras se cuentan unas a otras las bondades de determinado jabón, o donde los fabricantes de lavadoras coinciden en recomendarnos el detergente “x”.

¿Cuáles son los testimonios que mejor funcionan?

Sin duda, los más eficaces son los testimonios reales emitidos por personas reales. Los usuarios nos olemos las mentiras. Un testimonio «fabricado» produce rechazo.

Tampoco nos gustan los testimonios «cantones». Preferimos leerlos en contexto, mientras leemos sobre el producto o servicio en cuestión. En ese momento nos preguntamos si la oferta se dirige a alguien como nosotros: la lectura de un testimonio nos permite validar que esto es (o no) cierto.

¿Cómo se consiguen los testimonios? La respuesta es clara y directa: pidiéndolos.

Se trata de dar facilidades a los lectores, clientes, consumidores para que compartan su experiencia públicamente y de animarles a que lo hagan.

Pueden hacerlo en las plataformas y redes vinculadas a nosotros o en sus propias plataformas. Sea donde sea, es de agradecer y mucho que un cliente se posicione públicamente a favor de nuestra propuesta.

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PD: La ilustración procede de este artículo.

 

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¿Cuánto quieres cobrar? Valor, precio, salario

Valor, precio, salarioEl entrevistado de este mes para mi Lista es Pablo Tovar, coach y autor de ¿Cuánto quieres cobrar? 42 claves para negociar el salario que mereces.

En  su guía, Pablo disecciona los errores más frecuentes a la hora de negociar el salario y propone estrategias concretas para preparar y resolver mejor el tira y afloja salarial. Leyéndola, me doy cuenta de que el problema radica en una confusión, una sola. De ahí que la entrevista a Pablo gire alrededor de una sola pregunta:

Neus_  Pablo: ¿ Cuál es la relación entre valor y precio?

Pablo_

«Precio y valor son dimensiones relacionadas pero distintas. El precio que un comprador racional está dispuesto a pagar por un bien es directamente proporcional al valor que para él tiene ese bien. Por otro lado, el precio de un bien, una vez fijado, es ajeno al observador que lo evalúa. El valor, en cambio, es siempre subjetivo, y depende del observador que lo juzga. Productos con un mismo precio a unos les parecen caros y a otros baratos.

Si nos centramos en el salario, que es el precio del factor trabajo, está extendida la creencia de que nuestro salario es equivalente a nuestro valor.  Esto no es así si tú no quieres.  Podemos influir y mucho en nuestro valor percibido y, de este modo, también influir en el precio que están dispuestos a pagar por nosotros. ¿Cómo?

1. Debemos reducir la oferta al máximo

Esto significa diferenciarnos. Esto es lo que persigue la Marca personal y ese es el reto en un proceso de selección: conseguir presentarte como el mejor candidato para lo que la empresa está buscando. Tu  capacidad para negociar puede y debe aumentar conforme avanza el proceso de selección. Al principio no dejas de ser uno más, pero si llegas al final y te hacen la oferta es muy probable que ya ningún otro candidato sea comparable a ti y que estén dispuestos a pagar por ti más de lo que tenían previsto.

2. Podemos aumentar la demanda

Se trata de promover las bondades de nuestra profesión, de nuestros conocimientos y habilidades, para que cada vez sean más demandados y la necesidad de nuestros servicios profesionales aumente.

Reducir la oferta y aumentar la demanda son los dos caminos para aumentar el valor que la empresa te asigna y de ese modo influir en el precio que está dispuesta a pagar por ti, i.e. tu salario.

Neus_ Gracias, Pablo,  por abordar un tema poco visible como es la dinámica de la negociación salarial. Como toda negociación, hablar del salario es «entrenable». Diferenciar el propio valor del propio precio me parece una actitud básica para llegar a un acuerdo que satisfaga a ambas partes, al contratante y al contratado.

Puedes ampliar la información sobre su libro y sobre Pablo en este enlace.

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